Reducir la carga fiscal en el Impuesto sobre Sociedades antes de que finalice el año es posible mediante la implementación de diversas estrategias fiscales. Entre ellas, destacan la libertad de amortización para vehículos eléctricos e híbridos enchufables, lo que permite una amortización acelerada de estos activos, reduciendo así la base imponible. Esta medida también se aplica a la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Otras estrategias incluyen el control de los gastos de atenciones a clientes y proveedores, que son deducibles hasta el 1% de la cifra de negocios, y la aplicación de deducciones por donativos, con un porcentaje deducible que ha aumentado en 2024 al 40% o al 45% si se realiza a la misma entidad beneficiada en los dos años anteriores. Además, la reserva de capitalización ofrece una deducción del 15% de los fondos propios, lo que representa una oportunidad importante para reducir la base imponible.
Empresas de reducida dimensión pueden beneficiarse de la reserva de nivelación si su cifra de negocios es inferior a 10.000.000 euros, permitiéndoles así una reducción fiscal. Inversiones en energía renovable gozan de la libertad de amortización hasta 500.000 euros, sujeta a ciertos requisitos como el mantenimiento de la plantilla de trabajadores.
Para lograr una optimización fiscal efectiva en 2024, las empresas deben considerar estas y otras medidas antes del cierre del ejercicio. Cada movimiento fiscal cuenta, y una planificación adecuada puede resultar en ahorros significativos que, a la larga, aumentarán la rentabilidad de las empresas.