Llega un momento en el que debemos dejar nuestro hogar desde pequeños y en el que debemos de elegir cuál será nuestro futuro hogar. En este momento surgen muchas dudas y desconocimiento, una de las dudas más frecuentes es saber si nos darán la famosa hipoteca.
El término correcto para referirse a la hipoteca es crédito hipotecario y en este artículo podrás resolver todas tus dudas, desde lo que es exactamente, los diferentes tipos que hay y las condiciones que te van a pedir para que se pueda llevar a cabo, así que estate atento y toma nota.
¿Qué es un crédito hipotecario?
Como decimos en la entradilla, el crédito hipotecario no es más que el crédito que muchos denominamos únicamente como hipoteca. Un crédito destinado a poder comprar una vivienda y que supone además, una garantía que protege al acreedor (el banco) en caso de impago por parte del deudor (prestatario).
No deja de ser un crédito monetario que en el banco nos concede con el fin de poder comprarnos una vivienda. Una vez concedido, podemos acceder a la compra de la vivienda que queremos, pagando al banco durante el plazo de años que se haya establecido para la devolución del dinero. Lo habitual es pagar cada mes un recibo de dicho préstamo hipotecario, cumpliendo además con una tasa de interés fija (o variable).
Un notario certifica la concesión del préstamo hipotecario, para el cual previamente el cliente del banco debe cumplir una serie de requisitos que normalmente suelen tener que ver con el hecho de hacernos clientes de la entidad que nos concede el crédito (si no lo somos ya), que tengamos algún tipo de aval y como no, que podamos justificar nuestros ingresos para asegurarnos que vamos a poder devolver lo prestado.
Tipos de créditos hipotecarios
En España existen varios tipos de créditos hipotecarios, en función de nuestro sueldo y la capacidad que tengamos para devolver lo solicitado.
Crédito tradicional
Este es el crédito que suele solicitarse más. Consiste en el pago de cuotas de manera mensual y siempre con el mismo importe hasta que finaliza la deuda.
Crédito flexible
Un crédito que suele solicitarse para clientes que no tengan unos ingresos estables cada mes. Puede por ejemplo ser un crédito que solicitar si eres autónomo y sabes que durante un periodo de meses quizás vas a facturar menos. Este crédito se adapta mejor a las necesidades de los clientes ya que podemos aplazar el pago del crédito hasta un 50% de la deuda, de modo que se reduce la cuota mensual de manera drástica. Ese 50% que nos quedará por pagar tendremos que abonarlo, eso sí, cuando llegue la cuota final, aunque siempre vamos a tener la opción de solicitar otro crédito para liquidar lo que previamente hemos adeudado.
Otros tipos de créditos
Los dos tipos de créditos señalados son los más habituales, aunque también tenemos opción de que el crédito hipotecario se nos cargue a la tarjeta de crédito (sin interferir en el gasto que hagamos con ella para otras cosas), y que mes a mes nos vayan descontando una cuota.
Los requisitos para pedir un crédito hipotecario
Como ya os hemos señalado anteriormente, para poder pedir un crédito hipotecario será necesario cumplir una serie de requisitos que aunque pueden variar en función de la entidad bancaria a donde te dirijas para solicitar tu crédito, podemos enumerar aquellos que suelen ser generales y que nos van a pedir en cualquier banco.
Edad
Uno de los primeros requisitos tiene que ver como no, con la edad. El mínimo evidentemente serán los 18 años mientras que el máximo serán los 64 años y 11 meses.
Salario
Para pedir cualquier crédito hipotecario y de hecho, para solicitar cualquier crédito, el banco va a tener muy en cuenta nuestro salario neto mensual de modo que a partir de este haga sus cálculos y puede saber cuál va a ser el valor del crédito hipotecario solicitado en función de la calidad de pago.
Además del salario, el banco va a tener en cuenta cualquier otra fuente de ingresos que podamos tener y cuál es el valor del inmueble que queremos comprar. Por eso es importante tener preparadas las declaraciones de la renta de años anteriores:
Cuanto más garantía de pago tengamos (acreditando un buen sueldo y alguna otra fuente de ingresos), mayor serán nuestras opciones a que el crédito hipotecario sea también más grande.
Es por ello, que muchos jóvenes ya establecidos los cuáles solicitan un crédito hipotecario suelen lograr lo que solicitan ya que pueden justificar sus ingresos, que además serán regulares y con ello garantizar el pago de esa hipoteca.
Historial de crédito
El historial de crédito hace alusión a los pagos previos y regulares que estemos haciendo o hayamos hecho en función de los distintos créditos que tengamos con otras entidades.
Es decir, que el banco va a mirar si tenemos otros créditos o si hemos pagado regularmente y sin problema alguno por ejemplo una tarjeta de crédito, o un préstamo personal o incluso puede que miren si pagamos mensualmente los servicios básicos, como el de telefonía.
Ni que decir tiene que siempre será recomendable que antes de que solicites cualquier crédito hipotecario ya hayas pagado cualquier otra deuda, préstamo o crédito que hayas solicitado previamente.
Capital Inicial
Un requisito indispensable para pedir un crédito hipotecario será también que puedas aportar una garantía de al menos un 10 o un 20% de capital en función del importe del crédito que vayas a pedir.
El banco podrá comprobar así si tienes capacidad de ahorro en función de tu salario base y fuentes de ingreso.
Además, el banco valorará que tengas ese capital el cuál en un principio suele destinarse siempre para costear los gastos administrativos que se producen al comienzo de cualquier concesión de crédito hipotecario.
¿Que documentos necesito para pedir un crédito hipotecario?
Junto a los requisitos señalados, el banco te va a solicitar una serie de documentos para acabar de analizar tu comportamiento financiero y que se decidan, o no, a darte el crédito. Como ocurre con el apartado anterior, cada entidad financiera puede solicitar una serie de documentos concretos, pero por norma general estos son los que tenemos que presentar:
- Copia de Hoja Resumen (HJ) y Pedio Urbano (PU) del año cursante: Con estos documentos el banco podrá validar el pago de impuestos y servicios dentro del municipio en la que se encuentra registrado el cliente. Estos dos documentos forman parte de la Declaración Jurada de Autoevalúo.
- Copia de Testimonio de Título de Propiedad: este es un documento que aporta el vendedor o propietario del inmueble que queremos comprar. Con dicho documento se puede validar la existencia de un proceso de adquisición de una vivienda registrada frente a los estatutos legales y jurídicos.
- Copia del DNI vigente: Si se trata de una persona jurídica, se tendrán que presentar los poderes (en vigencia) de los representantes de la empresa, y poder demostrar así la disposición con respecto a la vivienda y ser los dueños originales.
- También tenemos que aportar un documento que justifique que la minuta de compra y venta del inmueble por parte del vendedor y tener esta registrada la fecha de entrega del inmueble a su nuevo inquilino. Nuestra firma como comprador debe aparecer también en ese documento.
Junto a los documentos que os hemos mencionado, es también habitual que los bancos soliciten estos otros documentos:
- Solicitud de crédito hipotecario
- Declaración de salud
- Certificado de renta y antigüedad
- Estado de situación financiera
- Carta oferta de venta
- Mandatario judicial.
- Autorización para informe de deudas otorgado por la Superintendencia de Bancos
Y también como no, los bancos pueden solicitarnos estos otros documentos a modo de «antecedentes«:
- Fotocopia de la Cédula o Documento Nacional de Identidad
- Las tres últimas nóminas (fotocopia)
En el caso de pedir un crédito hipotecario junto a un codeudor nos pedirán estos otros documentos:
- Estado de situación
- Declaración de Saludos
- Certificado de antigüedad y renta
- Autorización para informe de deudas otorgado por la Superintendencia de Bancos
- En el caso de un codeudor cónyugue, se tendrá que presentar un certificado que valide la relación
- Fotocopia de Cédula o Documento de Identidad
Pedir un crédito hipotecario en España
Pedir un crédito hipotecario en España sigue siendo una de las soluciones que muchos ven para el acceso a una vivienda aunque tenemos que hablar a la hora de solicitarlo en función de nuestra situación financiera o económica.
Hipoteca sin Aval
La hipoteca sin aval es quizás el préstamo hipotecario ideal ya que supone que podamos solicitar un préstamo para comprarnos una casa, pero si tener un aval, es decir, una tercera persona que nos avale en el caso de que no podamos hacer frente el pago de la hipoteca.
Si nuestro sueldo ya representa el 30 o el 40% de la deuda del crédito solicitado quizás no tengamos que comprometer a que otra persona nos avale, algo que a los bancos siempre les interesa aunque no siempre recomiendan como algo necesario.
En el caso de querer contar o tener que contar con un aval hipotecario a la hora de solicitar el préstamo será bueno entonces que busquemos una vivienda que tenga un valor inmobiliario que sea inferior o tener también un buen capital de ahorro para cubrir los gastos administrativos y de este modo lograr el 100% de la cotización.
Hipoteca para Jóvenes
Muchos son los jóvenes que buscan vivienda y de este modo poder irse por fin de casa. Los bancos no suelen incentivar demasiado los préstamos hipotecarios «clásicos» como estamos viendo o cómo suelen conocerse, sino que suelen incentivar el que la gente a partir de 18 años compre su primera vivienda.
Como no, la idea de este tipo de préstamos hipotecarios es la de atraer a nuevos clientes que fidelizar a la entidad bancaria (qué mejor modo que con un préstamo hipotecario) contando además con alguna que otra «facilidad de pago» siempre y cuando podamos garantizar que tenemos un trabajo estable y un sueldo que se corresponda.
De este modo puede ser hasta «fácil» que nos concedan un crédito hipotecario que posiblemente tengamos que devolver en un plazo que suele establecerse en unos 20 años.
Hipoteca para Autónomos
En cuanto a la hipoteca para autónomos, es decir, para las personas que trabajan por cuenta propia, siempre deben esperar al menos dos años de actividad certificada para poder solicitar un crédito hipotecario ( y de hecho, cualquier tipo de crédito). De este modo, pueden justificar que sus ingresos como autónomos son estables y que no dependen de terceros.
Si eres autónomo y quieres solicitar un crédito hipotecario tienes que saber además que es posible que el banco te pida un informe de tus actividades labores, en el que describas tareas, salarios percibido y hasta descripciones generales de los clientes.