Con una caída en las operaciones financieras de casi el 9% en un contexto de incertidumbre y volatibilidad en los mercados, las Cajas de Ahorro ven caer sus beneficios: sólo un 0,2% más que el año pasado, sumando 2.656 millones de euros en el primer trimestre de este 2008.
Una disminución en beneficios y actividad que se explica con la desaceleración que padecen las economías española y mundial, según la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), que también reconoce una menor dotación de recursos en este tipo de instituciones crediticias y un fuerte aumento en los costes financieros (de cerca del 50%).
Sin embargo, la CECA también apunta que se mantiene el ritmo de crecimiento que las cajas disfrutaban antes de que las condiciones fueran menos favorables: un 14%.
Estamos en un punto de la crisis donde las cifras comienzan a ser involuntariamente engañosas, pues si bien el crecimiento de los beneficios generados por los productos de las Cajas de Ahorro es del 35%, buena parte de ese volumen obedece al aumento de los costes y las tazas de interés.
Los beneficios por comisiones de las Cajas de Ahorro se han estacado en un 0,3% y la morosidad se ha mantenido en un 1,4%.