Ante una disminución de la inversión y el consumo, el Banco de España señala el alto riesgo de que el paro de alta duración se instale entre nosotros. O en otras palabras: la economía española ha caído en un proceso de destrucción de empleo.
Desde 1996 no se habían producido cifras tan altas de desocupación. Febrero ha rebasado incluso las expectativas más derrotistas cuando el número de personas sin empleo ya rebasa los 3 millones y medio.
Baja en el consumo de los hogares, en las compras de equipamiento industrial y en las solicitudes para nuevos emplazamientos inmobiliarios son los factores que el Banco de España identifica como responsables de un estancamiento económico que tardará en romperse, en su boletín de febrero.
El principal sector del que proviene la destrucción del empleo es la construcción. Puestos de trabajo de alta especialización de muy difícil reconversión.
Fuente | El Economista