Las rebajas invernales, habitual tónico para los negocios, han sido más bien deslúcidas este año, y ni siquira el canto de sirenas del dinero plástico ha seducido a una buena parte de los consumidores, particularmente a los usuarios de tarjetas de crédito: 1 de cada 4 se lo ha pensado dos veces antes de aprovechar los saldos invernales.
Según un estudio de TNS para el grupo CPP, el uso de tarjetas de crédito se redujó en un 24% en comparación con las rebajas del 2008. Cifras que nos hablan, a las claras, del temor de los consumidores antes una economía frágil y la evanescencia de unos brotes que no se terminan de concretar al nivel de la calle.
Sin embargo, no todos son llamados a la mesura y la abstención: el dinero plástico sigue llamando a la lujuria del derroche. Según este mismo estudio, más del 18% de los usuarios tiene 2 o más tarjetas, y un 38% de ellos no tiene ningún control sobre lo que gasta.
Fuente:Europa Press