Hace bien poco el crowdfunding era un técnica desconocida en España, sin embargo, ya en la década de los 90, muchos proyectos salieron adelante gracias a plataformas crowdfunding en Estado Unidos.
Para los que todavía desconozcan el término, el crowfunding consiste en la coopreación colectiva llevada a cabo por personas que realizan proyectos para conseguir dinero u otros recursos, básicamente es una forma de financiación, en la cuál se realizan microdonaciones a cambio de una recompensa si se llega al objetivo establecido.
Esto permite el triunfo de las ideas, antes un proyecto o una idea solo se podía llevar a cabo si tenías dinero o contabas con un gran inversor que confiase en tu idea, algo bastante difícil. Sin embargo, gracias a la era digital el concepto de negocio cambia radicalmente, ahora si se pueden llevar a cabo proyectos que no cuentan con un gran inversor a su espalda, ya que quienes lo financian y aportan para la realización es el consumidor final, por eso me refería al triunfo de las ideas, ya que si la idea es buena, el público se va a dar cuenta y va a apostar por ello.
El triunfo del crowdfunding se basa en tres principios:
- Reduce costes y riesgos
- Las comunidades en Internet y las redes sociales permiten que se viralice el proyecto
- Ofrece una recompensa que motive a la gente a aportar, fidelizar al mecenas
Las principales plataformas son Kickstarter, Projeggt, Crowfunder a nivel mundial, pero ya en España han surgido muchas plataformas del estilo, haciendo mención especial a la pionera en nuestro país Lánzanos y Goteo. El asentamiento en España permite moldear las ideas de negocio para conseguir que sean rentables, sabiendo que la fuerza está en uno mismo, ya que tienes que venderlo tú y al estilo que creas que mejor se adapte.
El crowdfunding abre una puerta nueva en el mercado, aprovechando el avance de la era digital, el saber que “todo está conectado” y se puede propagar a una velocidad que era impensable hace unos años. El emprendimiento es posible, los jóvenes deben aprovechar al máximo las herramientas del Social Media, ya que, repito, si tú idea es buena se puede materializar, pensemos más en las ideas, en solucionar una necesidad y olvidemos los modelos de negocio anteriores basados en una dictadura capitalista que no aporta nada al consumidor, ni a la sociedad.
Es un motor de cambio social, una salida para todos los jóvenes que creen que no pueden encontrar empleo o que creen que sus ideas no son buenas, pues bien, eso que lo valore la gente y no una entidad financiera. El crowfunding promueve la cultura y el arte, hay muchos proyectos que son de carácter cultural o basados en la música, lo que está claro es que esta idea de negocio fomenta la creatividad y nos impulsa a un bienestar social y cultural sostenible.
Invirtamos en ideas.