La crisis del coronavirus está afectando a sectores muy diversos, y uno de los más perjudicado fue el del residencial turístico. Según palabras de Walid Moussa, CEO de FIABCI International: «El coronavirus va a traer una nueva etapa en el mundo. Nuestras rutinas y comportamientos serán distintos cuando acabe la cuarentena. El inversor en apartamentos turísticos tendrá problemas«, augura Walid.
Moussa prevé también que el estado de alarma provocado por el coronavirus va a acelerar la implantación del blockchain. “Estas semanas estamos viendo cómo el mundo virtual ya está en todas partes; y por supuesto, en el sector inmobiliario”.
Moussa ha analizado el presente y futuro del real estate en una mesa redonda virtual organizada por la proptech 4DMovIN y en la que también ha tomado parte Ramon Riera, presidente de FIABCI España y Europa.
Riera se congratula de que, en las últimas semanas, “hemos visto cómo se ha multiplicado la solidaridad entre propietarios e inquilinos”. En este sentido, Riera destaca que, en la gran mayoría de los casos, se están llegando a acuerdos para el pago de las rentas en el mercado del alquiler, “antes incluso de que el Gobierno anunciara ayudas para los colectivos vulnerables”.
Cambios en el retail y oficinas
Moussa se muestra convencido de que “vamos a pasar esta etapa, pero tenemos que tener paciencia”. Y recuerda que “las grandes ciudades son las que serán más perjudicadas: la sociedad va a tener miedo de visitar las grandes capitales”.
Por mercados, Moussa cree que hoteles y hospitality son los sectores que están padeciendo de forma más rápida y fuerte esta crisis. Sin embargo, Moussa confía en que “vamos a ver un turismo interno en los países, que servirá para paliar esas pérdidas por la caída del turismo internacional”.
El retail online, por el contrario, va a crecer mucho: “este mercado ya es fuerte en Estados Unidos, pero ahora, preveo que va a fortalecerse en todo el mundo”. Para los locales comerciales, Moussa pide que los propietarios ayuden al comercio en los alquileres. “Si no, nos encontraremos tras el COVID-19 que habrá locales, pero estarán vacíos y su comercialización será complicada”, agrega Riera.
En oficinas, FIABCI prevé que el coronavirus afectará a la contratación de espacios, porque “muchas grandes empresas se darán cuenta de que pueden tener a un 30% de sus empleados trabajando desde casa sin problema”.
Inversiones internacionales
En cuanto al capital internacional en real estate, “no podemos esperar que haya apenas inversiones a corto plazo”, apunta Moussa. El mercado residencial, y en especial el de inversión o segunda residencia, va a sufrir una “ralentización” por este motivo.
Sin embargo, el mercado de la vivienda más local será el menos afectado. Y como cierre del encuentro virtual, Riera reflexionó sobre cómo afrontará el sector inmobiliario la salida a esta situación: “si aprendimos algo de la anterior crisis, ahora vamos a aprender mucho más; si nos adaptamos tras la anterior crisis, ahora vamos a adaptarnos mucho más. En esta ocasión, además, con la gran ayuda de la tecnología”.