Por primera vez en la historia, y comprobando el sentir de muchos analistas, el oro pasa por encima de los 1.500 dólares, una barrera psicológica que se vaticinaba pronta a romperse, con la debilidad del dólar provocada por la incertidumbre las políticas de recuperación estadounidenses, la Crisis en Libia y la devastación en Japón.
Ante la debilidad de dólar frente el euro y otras divisas, el oro salió fortalecido como un valor refugio, y la semana pasada, antes del cierre de las sesiones de la Bolsa Mercantil de Nueva York, el metal dorado ganó casi cinco dólares en relación con su última valoración del viernes, y el precio del oro se estableció a 1.503.8 dólares por onza (en los contratos a futuro, con vencimiento en junio).
La devastación japonesa de marzo pasado y las revueltas del mundo árabe, han provocado temor en los inversores, que dan la espalda al dólar como seguro de valor y colocan sus depósitos en el oro. Una tendencia que ante la ganancia de valor del oro no hará sino aumentar (si, además, la incertidumbre mundial se ve incrementada por la inflación china y Europea, y e dólar se debilita más ante el euro, debido a la reciente subida de los tipos decretada por el BCE).