La paga extra de verano para los pensionistas en España llegará a las cuentas bancarias entre el 21 y el 25 de junio, junto con la mensualidad de junio en un único abono. Sin embargo, la fecha exacta de recepción variará en función de la entidad bancaria; por ejemplo, Bankinter realizará el depósito el día 21, mientras que CaixaBank y Sabadell lo harán el 24, y para los clientes de ING, BBVA o Unicaja, se espera que sea el 25. La Seguridad Social recomienda a los beneficiarios consultar con sus respectivos bancos para conocer el día preciso en que recibirán esta paga extra.
Esta paga adicional equivale al monto habitual mensual de la pensión. Es decir, si una persona cobra normalmente 1.100 euros de pensión, en junio recibirá un total de 2.200 euros. No obstante, no todos los pensionistas tienen derecho a este beneficio; aquellos que reciben pensiones por jubilación, viudedad, orfandad o incapacidad permanente por enfermedad común o accidente no laboral sí lo recibirán, mientras que aquellos con pensiones derivadas de accidentes laborales o enfermedades profesionales no, ya que estas se encuentran prorrateadas a lo largo del año. Asimismo, quienes comenzaron a recibir su pensión después del 1 de diciembre de 2024 solo obtendrán una parte proporcional de la paga extra.
Este 2025 las pensiones contributivas han experimentado un incremento del 2,8 %, mientras que las mínimas han aumentado un 6 % y las no contributivas, junto con el Ingreso Mínimo Vital, han visto un incremento del 9 %. Esta subida de las pensiones incide directamente en la cantidad recibida en la paga extra de junio, resultando en un monto superior al del año anterior. Este ajuste es especialmente significativo en un contexto económico donde cada incremento es valorado.
Cabe destacar que la paga extra de verano está sujeta a la retención del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), al igual que el resto de las mensualidades de la pensión. La cantidad retenida dependerá del ingreso anual total del pensionista y de su situación personal, lo que podría provocar variaciones en la cantidad final percibida por cada beneficiario. Para obtener un cálculo más preciso de la retención aplicable, se aconseja consultar con la Seguridad Social o con la Agencia Tributaria.