La batalla por el tiempo libre de millones de espectadores acaba de vivir un movimiento histórico. Netflix ha llegado a un acuerdo para comprar Warner Bros, incluidos sus estudios de cine y televisión, así como HBO y la plataforma HBO Max, por un valor empresarial de 82.700 millones de dólares y un valor patrimonial de 72.000 millones. La operación, anunciada oficialmente por ambas compañías, consolida al gigante del ‘streaming’ como el actor dominante del entretenimiento audiovisual bajo demanda.
La transacción se cerrará en efectivo y acciones, a 27,75 dólares por título de Warner Bros. Discovery (WBD), una cifra algo inferior a los 30 dólares por acción que manejaban algunos analistas cuando se filtraron las primeras conversaciones. La compra se completará, previsiblemente, tras la escisión del negocio de canales lineales y redes globales de WBD en una nueva empresa llamada Discovery Global, prevista para el tercer trimestre de 2026, y quedará sujeta al visto bueno de los reguladores.
Del videoclub por correo al imperio del contenido
El movimiento confirma la evolución de Netflix desde sus modestos orígenes como servicio de alquiler de DVD por correo a comienzos de los 2000. En 2007 la compañía dio el salto al vídeo bajo demanda por Internet, introduciendo el ‘streaming’ cuando aún era una rareza. Apenas dos años después ya superaba los 10 millones de suscriptores.
Hoy el escenario es muy distinto: según sus últimos resultados, Netflix alcanza los 301,6 millones de abonados en todo el mundo (dato de agosto de 2025) y compite con rivales del calibre de Amazon Prime Video, Disney+ o la propia HBO Max. Las subidas de precios y los cambios de política sobre las cuentas compartidas han provocado bajas en algunos mercados, pero la plataforma sigue liderando el sector con amplio margen.
Con la compra de Warner Bros, Netflix no solo suma una biblioteca colosal, sino también una marca histórica del cine y la televisión, con más de un siglo de producción detrás.
Qué incluye la operación
El acuerdo contempla la integración en Netflix de:
- Los estudios de cine y televisión de Warner Bros, responsables de clásicos como Casablanca o El mago de Oz y de franquicias modernas como Harry Potter o el Universo DC.
- HBO y HBO Max, con series emblemáticas como Juego de Tronos, Los Soprano, The Wire, Succession o The Last of Us.
- Un enorme catálogo de series de éxito global como The Big Bang Theory o Friends, que se sumarán a producciones propias de Netflix como Stranger Things, Miércoles, La Casa de Papel o Bridgerton.
Netflix ha adelantado que mantendrá la estructura operativa de Warner Bros, incluidos los estrenos en salas de cine, y que su objetivo es “unir lo mejor de ambos mundos”: la tradición de un gran estudio y la potencia de una plataforma global de ‘streaming’.
Más catálogo, más poder… y más escrutinio
Para los usuarios, el principal impacto a medio plazo será una oferta de contenidos todavía más amplia bajo el paraguas de Netflix. La compañía habla de “más opciones y mayor valor” para sus abonados y de la posibilidad de optimizar sus planes de precios combinando producciones de ambas casas.
Para la industria, sin embargo, la lectura es más compleja. Si esta operación sale adelante, Netflix pasará a controlar uno de los catálogos más potentes de Hollywood y una de las marcas premium del mercado de series, HBO. La concentración de derechos y franquicias en una sola plataforma podría cambiar el equilibrio de fuerzas frente a Disney+, Amazon o Apple TV+.
No es casual que Netflix haya incluido en el contrato una cláusula de 5.000 millones de dólares de penalización a favor de Warner en caso de que los reguladores bloqueen la compra. El precedente de Microsoft con Activision Blizzard —una operación de 68.700 millones de dólares que estuvo un año y medio bajo escrutinio de los reguladores de EE. UU., Reino Unido y la UE— planea sobre el acuerdo.
Sinergias millonarias y promesa de ahorro
Desde el punto de vista financiero, Netflix estima que la combinación permitirá ahorrar entre 2.000 y 3.000 millones de dólares anuales en costes a partir del tercer año y que la operación será positiva para el beneficio por acción ya desde el segundo año tras el cierre.
La compañía también gana capacidad de producción en Estados Unidos y acceso a una red consolidada de talento creativo, directores y ‘showrunners’ de primer nivel. Para la comunidad creativa, la unión supone más oportunidades para trabajar con grandes franquicias y llegar a una audiencia global desde una única plataforma.
¿Qué pasa con HBO Max y el resto de servicios?
Por ahora, ni Netflix ni Warner Bros han detallado cómo se articulará la convivencia de marcas. El comunicado oficial insiste en que se mantendrán las operaciones actuales de Warner Bros y que HBO y HBO Max seguirán siendo una oferta “complementaria y atractiva” para los consumidores.
En la práctica, los analistas esperan un proceso gradual de integración: desde acuerdos de compartición de catálogo hasta posibles ofertas combinadas o la absorción progresiva de HBO Max dentro del ecosistema de Netflix. Todo dependerá de las condiciones que impongan los reguladores y de la estrategia comercial que Netflix defina para los distintos mercados.
Un nuevo mapa para el entretenimiento en ‘streaming’
Si finalmente se cierra, la compra de Warner Bros por parte de Netflix marcará un antes y un después en la guerra del ‘streaming’. El líder del sector no solo refuerza su posición, sino que consolida bajo su paraguas algunas de las marcas y franquicias más reconocibles del audiovisual moderno.
Para el público, el resultado inmediato podría ser un catálogo espectacular. Para el mercado, la gran incógnita será si esta concentración de poder creativo y de distribución se traduce en más innovación y competencia… o en menos variedad real y menos opciones fuera del ecosistema de Netflix.
Mientras tanto, la operación inicia ahora un largo recorrido de autorizaciones y ajustes corporativos que se prolongará, como mínimo, durante los próximos 12 a 18 meses.
Preguntas frecuentes
¿Cuándo se hará efectiva la compra de Warner Bros por parte de Netflix?
El cierre de la operación está previsto para dentro de entre 12 y 18 meses, una vez se complete la separación del negocio de redes globales de Warner en la nueva empresa Discovery Global y tras obtener todas las autorizaciones regulatorias necesarias.
¿Desaparecerá HBO Max como plataforma independiente?
De momento no hay una decisión pública. Netflix ha indicado que mantendrá las operaciones de Warner Bros y que HBO y HBO Max seguirán siendo una oferta complementaria. A medio plazo podrían surgir cambios en la marca, las aplicaciones o los planes, pero dependerán de la estrategia de integración y de los reguladores.
¿Por qué esta adquisición preocupa a las autoridades de competencia?
Porque combina al mayor servicio global de ‘streaming’ por suscriptores con uno de los estudios más grandes y con una de las marcas de series premium más importantes, HBO. Esa concentración de catálogo y poder de negociación podría afectar a la competencia frente a otras plataformas y distribuidores.
¿Qué gana el usuario con esta operación?
En teoría, un catálogo más amplio y diversificado bajo un mismo servicio y la posibilidad de disfrutar tanto del contenido original de Netflix como del legado de Warner Bros y HBO. La duda es si, a cambio, aumentarán los precios o se reducirá la variedad de ofertas fuera del ecosistema de Netflix.









