Con la llegada del verano, muchas personas realizan deportes que no practican el resto del año, y por este motivo, son ellas mismas las que se encuentran interesadas en contratar seguros que resultan imposibles en otro momento. Es el caso concreto de ciclistas, senderistas, y hasta quienes realizan el Camino de Santiago, y por eso vamos analizar cómo se manejan las aseguradoras en este sentido.
Lo primero que se debe tener en cuenta, es que en la mayoría de estos casos, se trata de ciertas actividades deportivas más proclives a realizarse durante los meses estivales y que además conllevan un riesgo, por muy pequeño que sea, de lesión o muerte. Obviamente, el beneficio de contratar una póliza en este sentido tiene que ver con cubrir los hipotéticos incidentes que pueden surgir durante su práctica.
Qué hacer?
Básicamente, este tipo de seguros incluyen a aquellas personas que desean practicar actividades como ciclismo, buceo, senderismo y sobre, todo esos deportes que son considerados, “extremos”. Por este motivo, es recomendable que quienes pudieran ver afectados sus ingresos económicos como consecuencia de un accidente, se suscriban a este tipo de pólizas.
Otra ventaja es que, siempre y cuando uno se pretenda incorporar a este tipo de seguros, tiene que acordar las condiciones con la empresa, pero por lo demás evidentemente se paga una cuota única, o mensual por cada mes del verano, con la que podremos cubrirnos en caso de accidente.
Europ Assistance, la más original
Pero si todo esto ha llamado la atención y se establece como una alternativa cada vez más corriente cada año, no existe situación tan risueña como la de la firma Europ Assistance, que ha desarrollado una póliza para quienes recorren andando el Camino de Santiago, uno de los principales atractivos turísticos nacionales, a pesar de que en sí no supone un riesgo demasiado importante.