Existen muchos trabajos que no se caracterizan por un elevado agotamiento físico sino por tener un alto cansancio psicológico que puede ser más o menos intenso dependiendo del grado de motivación del trabajador y de lo rutinaria que sea la labor que se realiza. El agotamiento psicológico es una forma de cansancio mental que puede ser un indicador de que se debe parar y descansar. Sin embargo, de forma paradójica, muchas personas tienen una dependencia total de su trabajo.
Pues bien, aquí tienes una serie de consejos para poder poner remedio al agotamiento psicológico:
1) Ten unos hábitos de vida saludable, es decir, haz ejercicio, pasea y disfruta del aire libre, ten la mente activa a través de ejercicios tan sencillos como hacer sopas de letras o crucigramas, lee libros por placer y no por obligación…
2) Respeta el descanso nocturno de ocho horas diarias, asumiendo que tal vez, necesites dormir algo más de ocho horas dependiendo de tu grado de cansancio y también de tu estado de ánimo. En una etapa de tristeza se requiere dormir más, mientras que en un momento de alegría, la energía física es más que evidente.
3) Siéntete valioso por el trabajo que tú haces. Intenta innovar a través de la formación constante, aportando nuevas ideas, dando tu propio punto de vista… Es decir, si logras mejorar tu nivel de implicación también te sentirás mejor contigo mismo.
4) El agotamiento psicológico causa estrés y ansiedad. Por ello, intenta fomentar el humanismo en la empresa a través de la comunicación eficaz, o también, puedes mejorar la relación con tus compañeros de trabajo y con tu propio jefe. Es importante estar bien en la oficina desde un punto de vista emocional.
Imagen: Net Medicina