El otro día leí en algún sitio, creo que en El Mundo pero no estoy seguro (perdonad mi mala cabeza), que las agencias «físicas» de viaje habían perdido un millón de clientes debido a la competencia de las agencias «virtuales» o mejor dicho debido a las mejores condiciones que venían ofreciendo las oficinas de viajes vía internet.
Con motivo de ello me dio por pensar que el futuro de estos servicios y de muchos otros relacionados con los viajes y el ocio tendrá mucha presencia en la web. Hasta que me he topado con este artículo que alerta sobre el «cibersquatting» que no es ni más ni menos que el registro de dominios con nombres similares a los de las marcas punteras con la intención de desviar las visitas hacia sus propias páginas o para desprestigiarlas simplemente.
Estas noticias no deben hacernos titubear, no obstante, sobre la tendencia de los clientes hacia los nuevos medios de contratación porque parece que se están consolidando. Otra cosa es que haya gente espabilada que quiera aprovecharse y otra distinta es que estas empresas tengan miedo a la justa ira de los consumidores que pueden montar webs «alternativas» denunciando malas prácticas.
Sólo los mejores sobrevivirán pese a los malos tiempos.