De todo un éxito se catalogó la 1º Edición del primer programa de voluntariado corporativo realizado por la Fundación Adecco en el extranjero. En ese marco se prestó ayuda a un total de 140 emprendedores que pusieron en marcha su propia microempresa en Ecuador.
Casi 200 empleados de Adecco colaboraron en la iniciativa que llevaba por nombre ‘Low Cost: Ayudar cuesta muy poco’ y que se desarrolló en la península de Santa Elena.
Dicha ciudad cuenta con con 111.600 habitantes, de los que un 40,8 por ciento sobrevive con menos de dos dólares al día. Asimismo, la zona se caracteriza por sus problemas de sanidad, educación y trabajo.
Los empresarios «enseñaron a los voluntarios a luchar por lo que creen, a salir adelante a pesar de las adversidades y, sobre todo, a hacerlo con gran ilusión y con una sonrisa».
Francisco Mesonero, director de Responsabilidad Corporativo de Adecco y Director General de la Fundación Adecco, quedó muy conforme expresando que la experiencia «fue enriquecedora y se refleja en los rostros de los voluntarios». «Como ellos mismos señalan, ha sido un baño de humildad en el que lo material pasa a un segundo plano y los valores de las personas con las que convivimos (como el afán de superación, empatía, constancia, amistad, etc.) nos hacen reflexionar que existe un mundo diferente al nuestro».
En cuanto a los costos la Fundación Adecco aportó 60.000 euros al Programa JEPSE (Jóvenes Emprendedores de la Península de Santa Elena), creado por la ONG Ayuda en Acción para ‘revitalizar’ las microempresas productivas y de servicios turísticos consolidados en la zona
