Imagina la siguiente situación: Entras nuevo en una empresa y te destinan a una sección de la misma donde trabaja otra persona, tu compañero a partir de ahora.
Tú sabes lo que tienes que hacer, supongamos que sea registrar contratos en el ordenador. Y tienes varias carpetas de las que ocuparte (hay un poco de atraso por lo que hay carpetas por todas partes). Al ser nuevo lo que harías sería ponerte a trabajar en cuanto te enseñaran lo básico, ¿verdad? Bueno, pasados los días ves que tu compañero de trabajo, que también trabaja, puede tardar una media de una o dos horas con una sola carpeta cuando tú, en ese tiempo, consigues registrar tres carpetas.
¿Qué pasará más adelante? Pues algo normal: bajarás tu ritmo hasta el mismo que tu compañero. ¿Podemos decir que eso activa las neuronas espejo? Yo soy de la opinión que sí.
Las neuronas espejo son aquellas neuronas que se activan cuando una persona o un animal hace la misma actividad que se está observando. El ejemplo más claro lo tenemos con los bebés; cuando les enseñamos la lengua varias veces al final él también llega a hacer la misma opción.
Las neuronas, descubiertas por Giacomo Rizzolatti, Leonardo Fogassi y Vittorio Gallese en los años 80-90, son, en base a las opiniones de algunos autores, las responsables de detectar emociones, movimientos o intenciones de las personas.
Cuando una persona imita a otra lo que está haciendo es poniéndose en su lugar. En el ejemplo que hemos puesto lo que se trata es que la persona equilibra su trabajo con el de la otra persona (y, por qué no decirlo, si los dos cobran lo mismo, no va a trabajar uno más que otro, que es la opinión que todos tenemos).