La palabra pelotazo está desprestigiada pero describe muy bien ciertas operaciones aunque generalmente se asigna a enriquecimiento a base de gestiones más o menos turbias. En este caso no hay nada de eso sino el salto desde la modestia a cierta riqueza o comodidad vitalicia, llámelo usted como quiera. El caso es que unos jóvenes han vendido su web dedicada a la NBA por una cantidad millonaria, en dólares y en euros da igual, a una red de páginas deportivas estadounidense (Fantasy Sports Ventures) ni más ni menos que porque era y es un gran proyecto, original, trabajado y exitoso.
No sólo debe dar alas y razones a quienes piensan en triunfar en la red de redes sino también a cualquiera que crea en su propio proyecto por descabellado, fantasioso y difícil que parezca. Y me alegra además porque son paisanos.
Enlace: El País.