El jueves las noticias que llegaron de la bolsa no fueron buenas. El Ibex vivió su primera jornada de pánico desde que comenzó el año y se desplomó un 5,94%. Esto implica el mayor descenso desde el 22 de noviembre de 2008, cuando cayó un 6,3%, que situó al selectivo en el nivel de los 10.241,7 puntos.
La causa …. Los inversores optaron por recoger beneficios ante la incertidumbre sobre el sistema financiero y la economía española.
Ayer jueves, nadie podía evitar que el Ivex siguiera cayendo. Ni siquiera cuando el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet expresó que confía en que el Gobierno griego tome las medidas adecuadas para salir de la crisis o cuando el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, rechazó la idea de comparar a Grecia, ni siquiera allí se tranquilizaron los inversores.
La estabilidad está pendiendo de un hilo y las advertencias del BCE sobre los grandes y crecientes desequilibrios fiscales a los que se enfrentan muchos países de la eurozona, sólo complican más y más el mercado.
Eso, la posibilidad de que la crisis de Grecia e Irlanda se extienda, y sobretodo un par de medidas desasertadas del Gobierno (las reformas en las pensiones y la reducción del déficit público) hicieron el resto.
Queda el consuelo que tanto en Estados Unidos como en otras partes de Europa las bolsas también tuvieron un mal día …