El mercado laboral español ha experimentado un tercer trimestre de crecimiento, aunque con particularidades que merecen atención detallada. Se registró un incremento en el empleo, alcanzando las 22,3 millones de personas ocupadas, cifra récord que, a primera vista, sugiere un panorama laboral positivo. Sin embargo, esta expansión viene acompañada de un leve aumento en el número de desempleados, situándose alrededor de los 2,6 millones de personas y dejando la tasa de desempleo cerca del 10,5%. Este fenómeno indica que hay más individuos buscando empleo, ampliando así la población activa. A lo largo de los últimos doce meses, España ha agregado más de 560,000 empleos nuevos, mientras que la cantidad de desempleados ha disminuido en más de 140,000, señalando una recuperación del mercado laboral, aunque de manera desigual entre sectores.
Los sectores de la industria y la construcción han liderado este crecimiento, con incrementos superiores al 5% interanual, reflejando una demanda real de mano de obra que abarca tanto perfiles especializados como empleos más operativos. Por el contrario, el sector servicios, tradicionalmente motor del empleo en España, ha mostrado un avance más lento, con un crecimiento que apenas supera el 2% anual. Este último dato es especialmente revelador de la disminución en la intensidad de creación de empleo en sectores como la hostelería y el comercio, generalmente más dados a la estacionalidad.
Un aspecto significativo en este análisis es la tendencia decreciente en la contratación temporal y el ligero declive de la contratación indefinida. Esto es particularmente perceptible en ámbitos previamente caracterizados por alta rotación laboral, indicando una consolidación de empleo por debajo de lo deseable. Esta dinámica sugiere que, si bien la industria y la construcción están experimentando fuertes aumentos, los servicios avanzan lentamente y algunos empleos de menor estabilidad permanecen estancados.
Para aquellos en búsqueda activa de empleo o pensando en cambiar de sector, este escenario ofrece pistas valiosas. La industria y la construcción se presentan como opciones prometedoras para quienes buscan mayor estabilidad o se sitúan en áreas de demanda. En contraste, los profesionales del sector servicios deben adaptar sus estrategias y considerar cómo ajustarse a las realidades del mercado actual, posiblemente a través de formación especializada en subsectores más dinámicos. Este trimestre, lejos de ser un cierre, podría indicar la dirección hacia la cual se moverá el mercado laboral en los meses venideros, resaltando la importancia de una lectura atenta y estratégica del panorama laboral.
