Según han anunciado sus respectivos gobiernos, Rusia y China crearán antes de finales del mes de junio, el tan esperado fondo de inversión común, que en principio será dotado con hasta 4.000 millones de dólares.
La noticia, que posteriormente sería confirmada por los propios representantes del gobierno ruso, durante la visita del Viceprimer Ministro de China, Li Keqiang, a este país, en la que ambas naciones se comprometieron a apoyarse mutuamente mediante la firma ni más ni menos que de 27 contratos entre ellas, por valor de más de 15.000 millones de dólares, los cuales contaron con la participación del propio homólogo ruso, Igor Chuvalov.
En este mismo sentido, el director general del fondo ruso de inversiones directas, Kirill Dimitriev, declaró que “la creación del fondo de inversión sino-ruso por el fondo ruso de inversiones directas y la corporación china de inversiones va a convertirse en uno de los ejemplo de la cooperación eficaz en el ámbito económico entre Rusia y China”.
Por otro lado, también se ha informado que tanto el fondo ruso, como los integrantes del sistema de la corporación china, se encargarán de distribuir, cada uno de ellos, hasta mil millones de dólares para el fondo común, mientras que el resto del dinero será proveniente de distintos grupos de inversores de origen asiático.
Al respecto, se ha conocido además que los principales impulsores del fondo tienen la idea de que el mismo comience con su participación a nivel mundial, invirtiendo en industrias muy determinadas, como por ejemplo la agricultura, el transporte y la transformación de la madera.
Justamente, por estas horas se ha filtrado la información de que, posiblemente, alrededor del 70% de los recursos serán invertidos en suelo ruso, junto con países de la Comunidad de Estados Independientes, como pueden ser los integrantes del CEI, antigua Unión Soviética, aunque siempre manteniendo como excepciones los tres países bálticos y Georgia, y el 30% restante en la misma China.