No hay talento, y luego dirán que la gente no compra música
Y que hace uso de los programas de descarga vía internet o del top manta en lugar de premiar la «excelencia» musical comprado los cedés o deuvedés que gentilmente nos ponen a disposición. De lo contrario, argumentan, se acabará la cultura y con ella la música. Aún creyéndome estos seudoargumentos, que no lo hago, firmaría la sentencia de muerte ahora






