Septiembre es un mes conocido por representar un aumento en los gastos para muchos, especialmente debido a la vuelta al cole, las facturas acumuladas del verano y otros pagos pendientes. En este contexto, surge la pregunta de si es posible aplazar compras sin incurrir en intereses adicionales por parte del banco. La respuesta es afirmativa, ya que actualmente existen tarjetas de crédito que ofrecen esta posibilidad, aunque la letra pequeña puede complicar las condiciones de estas ofertas, haciendo esencial una elección informada.
Algunas entidades bancarias ofrecen periodos de gracia, que suelen ser de un mes, permitiendo financiar compras sin pago de intereses. Además, existen opciones para aplazar pagos específicos sin coste por un tiempo limitado. Se anticipa una tendencia en el sector bancario hacia la oferta generalizada de aplazamientos sin coste, destacando la importancia de encontrar la tarjeta adecuada a cada situación para evitar caer en condiciones adversas.
Entre las opciones destacadas para el aplazamiento de pagos sin intereses se encuentra la tarjeta Open Credit de Openbank, que permite posponer el pago de compras por un mes sin intereses. Otra alternativa es la tarjeta AplazaMe de Wizink, diseñada para financiar compras en comercios afiliados, ofreciendo la posibilidad de dividir el pago de las primeras operaciones del año en plazos de 3 a 6 meses sin intereses ni comisiones. A su vez, bancos como MyInvestor y Unicaja ofrecen condiciones competitivas, y BBVA permite el aplazamiento de compras a través de su app móvil, aunque con costes asociados.
Es importante tener precaución con las tarjetas revolving, las cuales, a pesar de permitir pagos mínimos mensuales, acarrean altos intereses y pueden complicar la liquidación total de la deuda. Por otro lado, el sector financiero se prepara para lanzar «Plazo Cero», un sistema que permitirá el fraccionamiento de pagos sin intereses ni comisiones en el punto de venta, esperando su implementación para finales de este año con una expansión prevista hasta 2026.
Con estas opciones, los usuarios disponen de diversas alternativas según la urgencia y el plazo deseado para aplazar sus pagos. Desde opciones sin coste hasta aquellas con intereses bajos, lo importante es evaluar la cantidad a aplazar y el tiempo necesario para ello, siempre buscando evitar gastos innecesarios.