Una de las primeras consecuencias del triunfo del PSOE en las elecciones de este fin de semana: crece el rumor de una fusión entre Iberdrola y Gas Natural para hacer frente al ingreso del gigante francés EDF en el mercado español.
La fusión de ambas energéticas era un rumor olvidado (y un hecho que nunca se concretó por presiones del gobierno de José María Aznar) hasta dos días antes de la elección, cuando Rodríguez Zapatero aseguró que no había impedimentos para el ingreso de EDF en el sector eléctrico español.
La primera reacción del mercado ante estas declaración y el triunfo socialista fue una subida de del 5% (0,51 euros) de las acciones de Iberdrola y un 2,66% (1,02 euros) de Gas Natural. Impulso que ha llevado al Ibex 35 a ganar 273,60 puntos en la jornada de hoy.
La segunda reacción: al parecer, los presidentes de La Caixa (Isidre Fainé) y de Iberdrola (Ignacio Sánchez Galán) han convencido al presidente de la Generalitat de Catalunya, José Montilla, sobre la necesidad de integrar un nuevo grupo para enfrentar a la competencia extranjera. La Caixa controla el 30% de Gas Natural.
Analistas consultados por Finanzas.com sostienen que esta fusión
crearía un grupo industrial con una capitalización bursátil cercana a los 72.000 millones de euros, lejos del tamaño de las eléctricas estatales europeas, «pero ya fuera de su alcance».
Un rumor, con fuertes resonancias especulativas, pero rumor al fin y al cabo.
