Volatibilidad, riesgo, rebotes imprevistos, descapitalización. En una palabra: riesgo. Moverse en un mercado bajista no es fácil, pero tampoco imposible.
1. Reducir el riesgo
Grandes participaciones, grandes riesgos. En un mercado volátil, el bandazo a la baja puede dejarnos en la calle si colocamos todos los huevos en la misma cesta. Diversificación y participaciones pequeñas hasta entender las tendencias del mercado.
2. Operar a plazos razonables
Evitar el pánico y dejar que el mercado tome posiciones, algo que debe ocurrir entre los 6 y los 12 meses, un plazo más que sensato para capitalizar.
3. Vender en fases avanzadas de un rebote
Los mercados bajistas presentan una certeza: sus rebotes son muy violentos. Y, de saber aprovecharlos, se podra obtener una buena rentabilidad vendiendo antes de que la alza termine. Para saber si se está ante un rebote que permitirá maniobrar hay que apostar por los valores que estuvieron bien cotizados antes del mercado bajista. En nuestro caso, y sin dudarlo, las inmobiliarias.
4. Mantener liquidez
El capital es la mejor estrategia ante un mercado volátil. Las oportunidades de hacerse con valores excelentes a precios de saldo son muchas, y los fondos y los índices ofrecen condiciones ventajosas. De manera que conviene disponer de una partidad para «lo que pueda caer«.