La nomofobia es la dependencia que muchas personas sufren respecto de su teléfono móvil, tienen el deseo de estar pendientes constantemente sobre las novedades en su teléfono. Sin duda, existen casos, como por ejemplo, los emprendedores que tienen que usar el teléfono de una forma regular a lo largo del año para estar en contacto con los clientes, concertar reuniones o poder realizar gestiones.
Ante la ausencia del teléfono móvil surge el estrés, la ansiedad e incluso, los ataques de pánico. ¿Cómo es posible reducir en ese caso, la dependencia del móvil?
1. En primer lugar, es indispensable apagar el teléfono una vez finalizada la jornada laboral para no seguir atendiendo gestiones de la oficina.
2. Por otro lado, aprendiendo a relativizar, es decir, si alguien te llama por teléfono, ten en cuenta que volverá a llamarte si tiene interés en localizarte.
3. Utiliza otras formas de comunicación, por ejemplo, el correo electrónico o el Skype para tener conversaciones que además, te resultan mucho más baratas.
4. Apaga el teléfono móvil cuando no quieras que te molesten o cuando necesites concentración.
5. Toma el teléfono como lo que es: un medio de comunicación, sin embargo, eres tú quien tienes que controlar tus gastos. Es decir, no puedes convertirte en un esclavo del teléfono porque tú eres dueño de tus actos.
Imagen: Pueblum
