El Ejecutivo no se queda quieto. A raíz de las malas previsiones realizadas por la UE y el aumento de las cifras al paro, se ha enviado un mensaje de tranquilidad para hipotecados y empresas.
Es intención del Gobierno ayudar a estos dos sectores. En el caso de los hipotecados se concederá una moratoria de hasta dos años para el pago del 50% de las cuotas hipotecarias para desempleados, autónomos en paro con cargas familiares y receptores de pensiones de viudedad.
De esta forma deberán pagar solo la mitad y posponer la otra parte.
Otra de las medidas es acerca de la deducción de la hipoteca la cual se podrá percibir mes a mes logrando de esta manera una menor retención. En la misma línea se encuentra el hecho de que aquellos que ganen menos de 33.000 euros al año se les retendrá dos puntos menos.
La terce medida es referente a la ampliación del plazo para comprar una casa para los titulares de una cuenta vivienda. De esta forma, aquellas que culminan en diciembre del 2010 disponen de dos años más sin que se pierdan los beneficios fiscales.
La última novedad pero no menos importante es que aquellos que vendieron una vivienda para adquirir otra, tienen ahora dos años más sin que se les apliquen impuestos.
Sin dudas no son medidas mágicas pero seguramente ayudarán un poco.
