El presidente ejecutivo del Banco Santander, Alfredo Sáenz, se mostró este martes favorable de limitar el uso del dinero público empleado para rescatar a los bancos.
Sáenz argumentó su postura en el hecho de que el dinero público no se debe concederse a los accionistas o a los gestores de los bancos rescatados.
«¿Por qué un banco con dinero público puede comprar otro banco de la eurozona? (…) Salvar a bancos con problemas sin reestructuraciones sería un error«, dijo Sáenz en el marco de una conferencia financiera.
Obviamente, Sánez aportó alguna idea. El mismo pretende un sistema más flexible, con ahorros de costos y en el que se reduzca el número de entidades financieras y oficinas.
En tal sentido dijo que «Preveo un sistema con menos entidades y menos oficinas».
Además, Sáenz, aprovechó defender el modelo internacional de Santander y reafirmó su idea de que si los bancos globales están bien gestionados pueden salir reforzados de la crísis.
El presidente del Santander cerró su alocución expresando que «Demonizar los bancos globales, sería un error».
