La Navidad es una época para estar con la familia y disfrutar de veladas interminables en Nochebuena y en final de año. Sin embargo, este reto resulta, especialmente, difícil, para aquellos que no tienen unas relaciones personales gratificantes y que además, llenan ese vacío y esas carencias con una ocupación constante y un trabajo interminable.
¿Cómo se debe actuar para poder cambiar este proceso emocional y disfrutar del tiempo de ocio en Navidad?
1) En primer lugar, haciendo frente a la ansiedad de apagar el teléfono móvil y de no mirar el ordenador. Estar desconectado te agobiará en un principio pero luego, te sentirás muy bien y mucho más tranquilo. Hay cosas que no son urgentes y que pueden esperar.
2) Por otro lado, en las conversaciones propias de los eventos familiares de Navidad debes olvidarte de las conversaciones de trabajo para hablar de temas distendidos. De lo contrario, si sigues hablando de trabajo no sólo corres el peligro de aburrir a los demás sino que tampoco lograrás el objetivo deseado en vacaciones: desconectar para volver con más energía después del descanso.
3) Si existe un tema que debas resolver urgentemente antes de irte de vacaciones entonces, hazlo. Pero no pases tus días libres con un tema pendiente ya que eso, te robará energía desde un punto de vista emocional.
4) La Navidad es un tiempo para disfrutar de la familia y descubrir el valor del amor. Por supuesto que el éxito en el trabajo es importante, sin embargo, nunca se debe descuidar en dicha balanza la perfección del hogar, la felicidad que brota de la amistad y de los pequeños detealles que hacen que este final de año se llene de buenos propósitos y de deseos.
Imagen: Sueños contra luz
